Tenemos memorizado que los
mandamientos son diez tal cual están expuestos en Éxodo 20 y Deuteronomio 5 (Moisés
habla de diez mandamientos en Éxo. 34:28, Deut. 4:13 y Deut. 10:4, como también
dice «cuarenta días y cuarenta noches» y «dos tablas de piedra» pero no cita
ninguna palabra de Dios que hubiera dicho «diez mandamientos»).
UNA LEY, DOS TABLAS Y ¿UNO, DOS O DIEZ MANDAMIENTOS?
Con relación a los mandamientos
podemos citar pasajes de la Biblia en los cuales Jesús y los apóstoles los
mencionan; entonces, la demostración de su vigencia para los tiempos del Antiguo
y Nuevo testamentos nos viene cómoda a la razón y a los sentidos. Más aún, aceptamos
que la ley del amor («El amor no hace mal al prójimo, así que el cumplimiento
de la ley es el amor» Rom. 13:10) son los mismos diez mandamientos que Jesús
expone en dos grupos y los llama «dos mandamientos» (Mat. 22:40):
-
- Los mandamientos 1 al 4, acerca del amor a Dios:
«Jesús le dijo: Amarás
al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda
tu mente. Este es el primero y grande mandamiento» Mat. 22:37-38.
-
- Los mandamientos 5 al 6, acerca del amor al
prójimo: «Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo» Mat. 22:39.
En el Nuevo Testamento no aparece
la expresión «diez mandamientos» pero sí dos menciones a las tablas donde fueron
escritos (2° Cor. 3:3, Heb. 9:4) y muchas menciones a los mandamientos y a la
ley. Este hecho no es trivial sino de gran importancia, tanto así que el
apóstol Pablo presenta una expresión aparentemente contradictoria pero no lo es
porque él está hablando de otra cosa. En Gál. 5:14 «Porque toda la ley en esta
sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo» no está exponiendo
la ley, es decir, el texto de la ley, sino está exponiendo acerca del
cumplimiento de la ley. El texto de la ley es «Oye, Israel… Y amarás al Señor…
Amarás a tu prójimo» Mar. 12:29-31 y se cumple en esta sola palabra «Amarás a
tu prójimo como a ti mismo».
Desde una lectura no cuidadosa de
Éxodo 20 y Deuteronomio 5, los mandamientos están contenidos en uno o más
versículos; y son disposiciones para hacer o no hacer algo.
Forma\Extensión
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Un versículo
|
Tres versículos
|
Cuatro versículos
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Total
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Hacer
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5°
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4°
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2
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No hacer
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1°, 3°, 6°, 7°, 8°, 9°, 10
|
2°
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8
|
|
Total
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8°
|
1°
|
1°
|
10
|
ESCUDRIÑAD LAS ESCRITURAS
Siendo la orden «Escudriñad las
Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y
ellas son las que dan testimonio de mi» Juan 5:39, procedemos de esa manera:
El 2° mandamiento dice:
- No
te inclinarás a ellas (v. 5)
No es una cosa sino son dos cosas
diferentes: hacer imagen e inclinarse ante la imagen son dos cosas diferentes. Aunque
se las use de forma indistinta, no es un mandamiento sino dos. Lo que llamamos
2° mandamiento no es uno sino dos mandamientos. Por tanto, no son diez
mandamientos, hasta aquí van once. Seguramente tenemos presente la no adoración
a las imágenes, pero ¿podemos decir lo mismo acerca de hacer imágenes o lo
tenemos como un mandamiento olvidado?
Asimismo, el 4° mandamiento dice:
- Acuérdate
del día de reposo para santificarlo (v. 8)
- Seis
días trabajarás, y harás toda tu obra (v.9)
- Mas
el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios, no harás en él obra alguna, tú,
ni tu hijo, ni tu hija… (v. 10)
- Porque
en seis días hizo Jehová… (v. 11)
Los versículos 8 y 10 están
referidos al reposo del séptimo día, el versículo 9 está referido al trabajo de
domingo a viernes y el versículo 11 está referido a ambos temas: al reposo y al
trabajo. El mandamiento acerca del día de reposo está en el versículo 8 y la orden
es en el sentido de hacer («acuérdate»), en cambio en el versículo 10 la orden
es en el sentido de no hacer («no harás»); y la fundamentación de ambos sentidos
está en el versículo 11 («en seis días hizo… y reposó en el séptimo día»). No
es un mandamiento sino dos mandamientos: el reposo, primero, y el trabajo,
después. Por tanto, no son diez mandamientos, once iban, y con este son
doce.
No afirmo ni sospecho que Moisés
se equivocó al decir que son diez mandamientos sino encuentro en la Biblia que
un mandamiento, y dos mandamientos, y diez mandamientos, son el resplandor de la
presencia de Dios viviente, de la relación íntima de la creación con el Creador,
como cuando «no sabía Moisés que la piel de su rostro resplandecía, después que
hubo hablado con Dios» Éxo. 34:29.
Seguramente tenemos presente el reposo
del séptimo día, pero ¿podemos decir lo mismo acerca de «seis días trabajarás»
o lo tenemos como un mandamiento olvidado? Dicho de otra manera: no estamos autorizados
a trabajar el séptimo día y por el contrario el mandamiento es «acuérdate del
día de reposo» y «no harás en él obra alguna»; asimismo, no estamos autorizados
a descansar de domingo a viernes y por el contrario el mandamiento es «seis
días trabajarás».